rss
email
twitter
facebook

sábado, 25 de septiembre de 2010

Consejos prácticos para salones comedores modernos Parte-2

Consejos prácticos para salones comedores modernos Parte-2

baixmoduls
Parte 2 Pasos a tener en cuenta para la eleccion, diseño, distribucion y decoracion de un salón comedor moderno.

¿POR DÓNDE EMPEZAR?

Cuántas veces nos plantamos en medio del salón, imaginando cómo quedaría el sofá en otra pared o sustituyendo la librería por una butaca… Este ejercicio de planificación es el que requiere un proyecto. Analizar todos los aspectos y tener claras las soluciones, antes de elegir el mobiliario, es la clave del éxito.

Analiza el espacio

Objetivos: Cada casa es un mundo, por eso es fundamental analizar el uso que vamos a dar a la estancia para poder acertar con el mejor equipamiento. Ello supone tener muy claro si lo vamos a dedicar exclusivamente a zona de reunión o bien deberá integrar algún otro ambiente (como el comedor, un rincón de biblioteca o de descanso). El estilo de vida nos dirá si necesitamos más plazas de asientos o, en cambio, preferimos destinar más metros a almacenaje (con armarios aparadores o librerías).
Equipamiento: Con estos datos ya puedes hacerte una composición del tipo de mobiliario que vas a necesitar (butacas, número de sofás, auxiliares, etc.).
¿Obras?: Paralelamente,  puedes estudiar si te conviene hacer algún tipo de reforma, que te permita ganar unos metros en el salón. Lo más frecuente es eliminar algún tabique o hacer un cerramiento para ganar la terraza.

Haz un plano a escala

Con ordenador: Existen programas de ordenador que facilitan enormemente la labor, pues una vez introducidas las medidas de la planta, te permiten ver en tres dimensiones cómo quedarían las distintas composiciones y los diversos acabados de mobiliario en  tu salón.
A mano: Pero si no dispones de esta tecnología, puedes lograr un resultado similar con un plano a escala, realizado sobre un papel cuadriculado. No olvides representar las ventanas y puertas, radiadores, columnas o retranqueos en la pared. Después sólo tienes que recortar distintas figuras de sofás, auxiliares y muebles (también a escala), para poder jugar con ellas sobre el plano hasta dar con la mejor distribución.



A TENER EN CUENTA…

Iluminación: La clave consiste en prever el tipo de iluminación que vas a crear: para ello es fundamental decidir dónde van a ir los puntos de luz, de forma que cuentes con los suficientes enchufes (suele ser necesario hacer algunas regatas) o los focos halógenos.
Aire acondicionado: Analiza el sistema y decide si será necesario algún cambio en la instalación.
Comunicaciones: Ten en cuenta las entradas de las líneas telefónicas, sobre todo, si tienes pensado crear un pequeño rincón de trabajo integrado en el salón.
Audiovisual: La instalación de un home-cinema con varios altavoces requiere una atención especializada, que estudie la acústica de la sala. Tenlo en cuenta antes de iniciar el proyecto.



CLAVES DISTRIBUCIÓN

Lograr un ambiente agradable, relajante y funcional no es sólo una cuestión de colores, texturas o complementos, sino que también depende, en gran medida, del acierto en la distribución del espacio. Una buena planificación nos permitirá determinar la mejor orientación y el equipamiento más adecuado para disfrutar de un salón armónico y equilibrado.

Bien dimensionado

Una de las claves para lograr un ambiente armónico es acertar con las dimensiones del mobiliario: las piezas deben estar en correspondencia con la planta para lograr un conjunto equilibrado. Hay que evitar a toda costa que los muebles parezcan “encajonados” o, por el contrario, que resulten muy pequeños para una sala grande.

Zonas de paso

Para ello es fundamental concebir un salón con zonas de paso claras y diáfanas. Es importante poder cruzar todo el salón sin tener que salvar “obstáculos” o haciendo zigzags. La lógica nos lleva a dejar pasos abiertos entre puerta y puerta, y entre puerta y balcón. Estos “pasillos” deben tener una distancia mínima de 90cm., para permitir un tránsito cómodo.

¿Cómo lo oriento?

Cada salón merece un estudio riguroso, aunque la lógica lleva a situar el sofá, la pieza principal, en la pared más larga del salón. No obstante, hay otras consideraciones que pueden hacer variar esta norma. Cuando hay una chimenea en la estancia, la opción más clara es tomarla como eje vertebral, en torno al cual recrear el salón. En otras ocasiones, la intención de aprovechar las vistas al exterior pueden llevar a disponer el sofá frente a las grandes cristaleras, aunque no se apoye en ningún tabique.
TRES DISTRIBUCIONES:

  1. En línea: Es la disposición ideal para salones alargados y estrechos. Para completar la zona de asientos, conviene entonces escoger piezas ligeras, como pufs o banquetas, que se puedan retirar cuando no se utilizan. Al tratarse de espacios reducidos, es mejor elegir un pavimento que potencie la luminosidad.
  2. En “L”: Esta disposición, quizás la más frecuente, juega además un importante papel en la distribución, pues la zona corta de la “L”, formada por sillones o butacas, nos ayudará a delimitar el salón respecto al comedor, si están integrados en un mismo ambiente. Otra alternativa, más actual, es la que permiten los sofás modulares con rinconera.
  3. Dos sofás en paralelo: En salones amplios y cuadrados se puede recrear una cómoda zona de tertulia enfrentando dos sofás. En estos casos, se puede elegir entre un amplio abanico de soluciones. Quizás la más sobria consiste en enfrentar dos sofás idénticos, pero para dar mayor riqueza decorativa al ambiente bastaría con elegir dos tapicerías distintas. Esta distribución se puede “cerrar” visualmente con dos butacas o dos pufs, de forma que se configura un salón en “U”.

PIEZAS CON ESTILO

Un bureau antiguo heredado de los abuelos o una alfombra comprada en Marruecos… Cualquier pieza de mobiliario, incluso los auxiliares, contribuyen a definir el estilo del salón imprimirle su personalidad, así que es fundamental elegirlos con esmero y teniendo muy en cuenta tanto el espacio como las necesidades funcionales y de almacenaje.

Mesa de centro

A la hora de elegirla ten en cuenta varios aspectos. En primer lugar, su utilidad: si te falta espacio de almacenaje, elige un modelo con cajones o armarios, o incluso un baúl o arqueta que podrás utilizar, por ejemplo, como mueble bar. Si no tienes mucho espacio, elige un diseño sencillo y ligero, lo más bajo posible: son ideales los realizados en cristal, acero inoxidables o maderas muy claras. En un salón amplio, con grandes sofás, puede ser conveniente situar dos mesitas gemelas en lugar de un solo modelo excesivamente grande.

Mesitas auxiliares

Si el espacio lo permite, coloca una a cada lado del sofá. Son muy prácticas para dejar el libro o una taza de té, pero sobre todo son fundamentales para dar apoyo a las lámparas de sobremesa, que proporcionan la necesaria luz puntual  en el salón. Existen muchas alternativas a las tradicionales mesitas, según el estilo que quieras dar al ambiente. Para darle un toque clásico, opta por un velador o un revolving, que además te ofrecerá un espacio útil para libros o revistas.

Módulo TV

Los programas modulares suelen incorporar un espacio para el televisor, pero si optas por otro tipo de mobiliario tendrás que pensar en el mejor lugar para éste. Si no quieres que quede a la vista, elige un mueble persianero o con puertas correderas, que te permitan ocultarlo cuando no lo uses. Si la pantalla no es un problema, tienes muebles de todos los estilos o, lo más actual, soportes específicos (tipo columna, estantería, módulo) que permiten integrar todo el equipo audiovisual en un sola pieza.
CREAR UN RINCÓN DE LECTURA
Crear un rincón propio, íntimo y agradable, para disfrutar de un buen libro es un lujo alcanzable. En realidad, no se necesita un espacio mayor de 150x150cm.; eso sí, hay que procurar que esté situado junto a una entrada de luz natural. Una butaca reclinable, una mesita auxiliar y un punto de luz adecuado serán suficientes.



EL SOFÁ

La adquisición del sofá no suele ser una decisión fácil. Nos debe entrar por la vista: por sus formas mullidas o sus líneas estilizadas, y por la textura y el color de su tapicería, pero también debe responder a unos criterios de ergonomía y resistencia, que garanticen un uso cómodo y una larga durabilidad.
DECÁLOGO PARA ACERTAR CON LA COMPRA

  1. Medidas: Cuando vayas a la tienda, deber tener muy claras las medidas. Allí, en un espacio amplio y de techos altos, se verán más pequeños. Fíjate tanto en la largura como en la profundidad.
  2. Estilo: Las líneas del sofá definirán el estilo del salón, así que es fundamental saber qué tipo de ambiente queremos recrear. Para ambientes clásicos, puedes decantarte por piezas de respaldos bajos, brazos curvados, patas de madera y tapizados en capitoné o estampados. Los diseños más actuales se caracterizan por las líneas más depuradas –muchos son prácticamente rectilíneos-, la ausencia de detalles, las patas metálicas y las tapicerías lisas.
  3. Color: El sofá puede ser un buen punto de partida para iniciar la decoración del salón, así que podrás elegir el tono que más te guste, y a partir de ahí realizar los coordinados con el resto de textiles y las paredes. No obstante, lo ideal es tener claro, como mínimo, la atmósfera que deseas recrear en el salón y la paleta cromática para ir sobre seguro. Ten en cuenta que los sofás de tejidos claros ayudan a aligerar visualmente las piezas muy voluminosas.
  4. Comodidad: El único modo de comprobar si un sofá nos resulta cómodo es probándolo. Así que tómate tu tiempo. Lo ideal es que no resulte ni excesivamente duro, ni blando. Ello depende básicamente del relleno: los hay de pluma, muy confortables pues se adaptan a la forma del cuerpo y después se recuperan. Los de espuma son mucho más económicos, pero también más rígidos; también se halla una versión intermedia, que mezcla ambos materiales. Lo último son los rellenos de látex, con propiedades antialérgicas e indeformables.
  5. Resistencia: Aunque te enamoras de su forma y su tapicería, es importante que tengas en cuenta su “esqueleto”, pues de él dependerá su resistencia y, por tanto, su duración en buen estado. Pregunta por el armazón: los más habitual es que sea de madera; si es así, comprueba que tiene una pata central que sostenga el larguero. Los más resistentes, pero también más caros, son los de acero.
  6. El bastidor: Las bases realizadas con muelles de acero y cinchas elásticas cruzadas son mejor solución, pues evitan que ceda por el centro. Otra opción son las cinchas de caucho entrecruzadas, pero resultan menos resistentes.
  7. Estampados: Los motivos grandes y vistosos centrarán toda la atención en la pieza y marcarán mucho la decoración. Una buena opción consiste en elegir una tapicería lisa para el sofá grande y reservar los estampados más vistosos o de colores más intensos para los asientos secundarios: biplazas, sillones o pufs tapizados.
  8. Tapicerías: Si se trata de una casa con niños, una buena idea es elegir una tapicería tratada para repeler las manchas. Por otra parte, ten en cuenta que el tipo de tejido deberá variar en función de si deseas recrear un ambiente cálido y envolvente o más fresco y luminoso. En el primer caso, son ideales los terciopelos, la pana, la chenilla o la alcántara, mientras que para el segundo serán buena elección los tejidos de algodón, como la loneta, o la piel.
  9. Fundas: Encargar unas fundas a la medida es la solución más práctica y eficaz para alargar la vida del sofá. Otra ventaja de las fundas es que permiten renovar la imagen del salón por muy poco dinero: puedes elegir una de un tejido fresco y en tonos alegres, para el verano; y otra, más cálida y sobria, para el invierno.
  10. Combinar dos sofás: Es una opción muy decorativa, pero para acertar conviene elegir dos modelos que mantengan la unidad de estilo y que tengan una altura de respaldo muy similar. Una buena idea es combinar un diseño liso con otro que muestre un sutil estampado, en la misma gama de color.

LOS SOFÁS MÁS FUNCIONALES

Los modernos diseños, además de ser atractivos y cómodos, aportan un plus de funcionalidad, con soluciones “a la medida”. Los reyes de la versatilidad son los programas modulares, pero le siguen de cerca los modelos que incorporan algún plus, como mesitas auxiliares o librarías.

Modulares

Los programas modulares son el súmmum de la versatilidad, pues se diseñan “a la carta”, en función de las necesidades y el espacio disponible. De este modo, se puede elegir entre los acabados más diversos, no sólo en lo que se refiere a colores y tejidos, sino también en la estructura. Así, por ejemplo, si no hay espacio para un segundo sofá, resulta muy práctico elegir un diseño con chaise-longue, que permite estirarse o bien ganar una plaza de asiento cuando es necesario. Otra de las opciones más habituales es conformar un sofá con rinconera, de forma que se aprovechan al máximo los metros disponibles. Y para los que quieren la máxima comodidad, existen firmas que permiten incorporar algún módulo con el respaldo reclinable o bien algún accesorio, como bandejas o contenedores.

Con mesas integradas

El diseño moderno avanza hacia la integración de varios elementos en uno, para garantizar la máxima comodidad. En el caso de los sofás, una de las grandes innovaciones se halla en la incorporación junto a la zona de asientos de una práctica mesita, que suple a la clásica auxiliar.

Sofás-Cama

En pisos pequeños, los sofás-cama son una solución a tener en cuenta, pues permiten ganar un “dormitorio” para las ocasiones especiales. Los nuevos modelos han mejorado considerablemente respecto a los primeros, y garantizan la máxima comodidad tanto en su versión asiento, como en cama. Otra posibilidad son las butacas, que permiten ganar una cama individual; un modelo con ruedas, para poder montarla fácilmente.

CON  ESTANTERÍAS

En la misma línea, y con objeto de ofrecer diseños polivalentes, que proporcionan una doble función, encontramos sofás dotados de librerías en ambos lados. Sin duda, una forma original y práctica de ganar espacio de almacenaje en el salón.
UN CHILL-OUT  EN CASA
Para recrear un ambiente muy actual y joven en el salón, hay propuestas novedosas. Una podría ser un programa modular, de marcada influencia oriental, por tratarse de módulos muy bajos, con ausencia de patas y con alegre estampado floral. La comodidad está garantizada si, además, ponemos cojines mullidos.



COORDINADOS

Rayas, cuadros, flores, motivos naturales… Atreverse con los estampados y los coordinados textiles es, quizás, la asignatura más difícil de la decoración, pero también la más gratificante, pues proporciona ambientes ricos y dinámicos. Te damos las claves para no sucumbir ante el intento.

Reglas de ORO

  1. Además de los sofás, los cojines y las cortinas, a la hora de establecer los coordinados deber tener muy en cuenta el color de las paredes y el suelo, así como las alfombras o detalles como las pantallas de las lámparas. Sólo así conseguirás que el conjunto desprenda una gran sensación de continuidad decorativa.
  2. Coordinados no tienen por qué jugar siempre con el color o la combinación de estampados y lisos. Una forma sencilla de enriquecer el ambiente del salón consiste en contrastar tejidos de muy diversas texturas; no hay problema en combinar telas naturales como el algodón, el lino o la chenilla, con otros más sofisticados como el terciopelo, la seda o el raso. Los distintos matices de las telas crearán un interesante contraste.
  3. Para no correr ningún riesgo con los coordinados, apuesta por las colecciones completas que ofrecen las firmas textiles (con estampados diversos y distintos tonos lisos a juego). En muchos casos incluyen, además, el coordinado en papel pintado.

Sin excesos

Para lograr ambientes armónicos y serenos se recomienda restringir la paleta a dos o tres tonos. La regla para lograr un buen coordinado es que cada tela mantenga  una de las tonalidades dominantes. De este modo se podrán combinar, sin miedo a equivocarse, todo tipo de estampados (rayas, topos…).
Toque de color
No obstante, si quieres dar una mayor viveza al ambiente y ganar en riqueza decorativa, es interesante introducir en la paleta de color un tono más vivo e intenso. Para acentuar la sensación de unidad, conviene que el nexo de unión sea un color claro y neutro, como el blanco, el gris perla o el crudo.

Estampados grandes

Los estampados con motivos grandes sólo están indicados en estancias amplias, pues pueden saturar el ambiente. Del mismo modo, requieren piezas amplias, como unas cortinas o un sofá, que permitan ver bien la totalidad del dibujo. En general, los estampados oscurecen un ambiente, por lo que requieren una gran entrada de luz natural.

Serenos

Para recrear una sensación de mayor amplitud en salones pequeños, conviene decantarse por tejidos lisos o con motivos muy pequeños, pues resultan más ligeros. Asimismo, un buen truco para conseguir ampliar ópticamente el espacio consiste en unificar todo el ambiente en un solo color, dentro de una gama suave y luminosa (blanco roto, gris perla, arena…).



JUGAR CON EL COLOR

Los colores transmiten sensaciones e influyen en nuestro estado de ánimo, por eso es tan importante elegir bien la gama cromática que va a dominar en el salón, la estancia de la casa donde pasamos más horas.
Los colores de las tapicerías son la clave para lograr la atmósfera que deseas: fresca, cálida, serena o dinámica.

  1. Beiges y cremas: Son tonos suaves de una gama cálida y luminosa, por lo que suelen ser una apuesta segura. Crean ambientes serenos y armónicos. Combinan bien con los tonos tierra, y la paleta más suave de rojos, naranjas o azules. Permiten realzar cualquier variedad de madera.
  2. Rojos: Es una gama que transmite mucha energía y calidez. Si el salón es reducido, conviene limitarlo a los complementos, pues en exceso puede saturar el ambiente. Combina bien con maderas claras o decapadas, y con textiles blancos, crudos, piedras o arenas. Con verdes, dan un toque rústico.
  3. Malvas: Recrean ambientes livianos y románticos. Los tonos más intensos combinan bien con los grises, piedras y verdes, aunque se pueden buscar alianzas más atrevidas con el amarillo o el naranja. Los malvas y berenjenas quedan perfectos en tejidos frescos y naturales, como el lino o el algodón. Son tonalidades frías que conviene compensar con gamas cálidas.
  4. Azules: Es un color sereno y relajante, que ayuda a configurar una atmósfera liviana y fresca. Los textiles azules combinan bien con el blanco y crudos, con los cuales forman un tándem muy mediterráneo. Los coordinados dependen de la tonalidad: los más suaves combinan con tonos pastel (rosa, verde manzana, gris perla); en cambio, los oscuros coordinan con grises oscuros, berenjenas o fucsias.
  5. Verdes: Transmiten una gran sensación de frescor y tranquilidad. Son tonos fáciles de combinar, pues en su composición incorporan parte de frío (azul) y de cálido (amarillo). Así pues, se puede aliar con marrones, blancos, crudos o berenjenas… Las tonalidades intensas funcionan mejor con maderas claras, mientras que las más pálidas realzan cualquier variedad.

Tres esquemas

Ambiente armónico: Sin duda, la mejor opción para recrear una atmósfera sosegada y relajante, es optar por un esquema tonal. Se consigue combinando distintas tonalidades de un solo color en toda la estancia, tanto en textiles como en complementos.
Con un foco de interés: Una buena solución para crear un ambiente dinámico sin sobrecargarlo, es seleccionar una pieza para crear un foco de interés. En un salón con los sofás blancos resultará acertado contrastar una moderna butaca negra. También se puede optar por una chaise-longue con un estampado atrevido o bien elegir dos butacas de estilo clásico, con un tejido rico como un terciopelo en un color intenso como el burdeos o el verde.
De contraste:  Este esquema da lugar a ambientes alegres y dinámicos, que transmiten una gran energía. Se puede ceder todo el protagonismo a los coordinados textiles, combinando una amplia gama de colores, desde el fresa y el rojo, hasta el azul o el verde. Para no recargar el ambiente, se puede crear un telón de fondo blanco y elegir piezas de mobiliario de líneas rectas y auxiliares ligeros, de PVC o con la estructura metálica.



ELEGIR EL MUEBLE

A su papel como centro de reunión, el salón ha añadido nuevas funciones que incrementan las exigencias de equipamiento. El mobiliario debe responder a múltiples usos, desde albergar el televisor hasta ofrecer capacidad de almacenaje y decorar.

Ante todo funcional

Antes de elegir el mueble para el salón, decide qué uso vas a darle. Si vas a guardar en éste libros u objetos pesados, deberás elegirlo robusto y con baldas sólidas y cortas para que no se curven, mientras que si sólo se trata de objetos decorativos ligeros, puedes optar por materiales como el cristal y diseños volados con soportes invisibles.

Ligeras estanterías

Ligeras y muy funcionales, las estanterías deben responder a nuestras necesidades de ordenación, por lo que han de ser de un material resistente y adecuado al peso que vaya a soportar. Pero, al mismo tiempo, tienen que adecuarse al estilo de la estancia, ya sea integrándose y pasando desapercibidas o convirtiéndose en un elemento protagonista.

Elegantes Boiseries

En salones clásicos, una excelente opción es instalar una boiserie, una estantería de estilo clásico –de obra o madera natural- que, normalmente, ocupa toda la pared del suelo al techo y suele integrar una chimenea en el centro. Esto, unido a su estilo, con molduras y remates, confiere a la estancia una atmósfera elegante y sofisticada.

Bien integrado

Si buscas un salón lleno de luz y con un ambiente natural, combina varias piezas en acabado blanco piedra e incluye un elemento bajo para el televisor y sus accesorios, módulos de almacenaje abiertos y cerrados y una vitrina volada que aportará ligereza a la composición.
¿MODULAR…
La versatilidad de los sistemas modulares para el salón ha llegado a tal punto que ya es posible realizar composiciones prácticamente a medida. Los completos programas de mobiliario de distintas firmas no sólo proporcionan una oferta siempre creciente de módulos por dimensiones –con varias alturas, anchuras y profundidades distintas para cada elemento- sino también acabados. No obstante, si bien el principal atractivo de las propuestas modulares es su libertad formal, no puede negarse la corriente hacia los diseños minimalistas y de marcada horizontalidad. Depurados y capaces de integrarse en cualquier ambiente, son perfectos tanto para espacios reducidos como para los entornos diáfanos.
… O EXENTO?
A pesar de su gran flexibilidad compositiva, los sistemas modulares a base de estanterías y elementos cerrados pueden llegar a resultar visualmente pesados. Además, no son demasiado adecuados para ambientaciones tradicionales. En estos casos, una buena alternativa la protagonizan los muebles exentos, ya sean vitrinas, librerías o aparadores. Los hay de todos los estilos, desde los más innovadores, con sistemas de puertas incluso sin tiradores –de apertura por presión -, con superficies continuas que pasan desapercibidas al tiempo que garantizan una gran capacidad interior, hasta piezas clásicas en madera maciza, de sólidas formas y acabados artesanales con volutas y molduras.



SI TU ESTILO ES… ACTUAL

Una vez que hayas decidido el número de piezas que conformarán el salón, queda por decidir su estilo decorativo. Si buscas un entorno despejado, con predominio de líneas rectas y formas depuradas, el tuyo es, sin duda, el actual.
Formas envolventes y ergonómicas son las protagonistas de las butacas de vanguardia.

Sofás y algo más

Los nuevos sofás incorporan partes móviles, capaces de transformar los respaldos reclinables en asientos adicionales o en mesas auxiliares. A ello, hay que añadir extras que aportan valor añadido al sofá, como la capacidad de almacenaje interior y los auxiliares integrados.

Pura geometría

Los elementos de instalación volada y limpias formas geométricas, que aprovechan la altura de la pared sin saturar, son otra de las tendencias al alza, sin olvidar los flexibles paneles murales con fijaciones ocultas.

Acabados a la última

La tendencia actual apuesta por las chapas de madera natural, en wengué, teca y otras variedades exóticas, aunque también por el roble blanqueado o tintado. El vidrio coloreado –sobre todo para los frentes- y los lacados son la otra gran apuesta: en una gama de colores prácticamente inacabable y con superficies matizadas o de alto brillo.

Una nota de color

Violetas, fucsias, magentas, azules y verdes en sus versiones más saturadas y siempre en superficies lisas protagonizan la paleta más contemporánea. Dada su intensidad, conviene reservar estos tonos para piezas escogidas y compensarlas con un entorno diáfano y luminoso, en el que predomine el blanco o los tonos neutros.
¿SABÍAS QUE…
…Los elementos versátiles y de doble uso son los aliados perfectos para crear distintos escenarios según el momento y crear una sensación de amplitud? Mesas nido que multiplican su superficie, modelos con sobre elevable y capacidad para guardar…



SI TU ESTILO ES… CLÁSICO

El refinamiento y el lujo de una decoración clásica otorgan un aspecto suntuoso al hogar. Una ambientación clásica destaca por su elegancia y por una selección de muebles trabajados, artesanales y nada convencionales. Todo ello para crear un marco cálido y acogedor que transmita una estética sofisticada y atemporal.

Pura calidez

Una de las tendencias del momento en interiorismo es el romanticismo, que propone ambientes cálidos y acogedores que invitan al sosiego. Reivindica una mirada hacia el pasado nada anticuada, ya que propone acabados novedosos, como las pátinas grises o coloreadas, el pan de plata o las lacas negras mate.

Piezas antiguas

Un interior clásico se caracteriza por su decoración trabajada y singular, a base de materiales y acabados que aportan confort y calidez. Para ello, emplea una paleta cromática basada en rojos, granates, verdes y marrones, con textiles suntuosos, de estampados tradicionales en confecciones sofisticadas y muy elaboradas.
El capitoné es una de las señas de identidad del estilo clásico. Si quieres darle un aire más actual, resérvalo para unos pufs o combínalo con una tapicería actual.

Delicadeza formal

Las formas curvas y envolventes no sólo son confortables, sino que ayudan a crear ambientaciones con un suave estilo clásico. Brazos y patas torneados y tapicerías estampadas son el mayor exponente de las piezas de este estilo, del que es claro exponente el sofá.
JUGAR AL CONTRASTE
¿Quién puede resistirse al encanto de un mueble con siglos de historia a sus espaldas? Para que puedas disfrutarlos, aunque prefieras una decoración más actual, ten en cuenta que los detalles clásicos e incluso barrocos no sólo tienen cabida en un salón depurado o minimalista, sino que le aportan una riqueza decorativa basada en el contrapunto entre ambos estilos.
Un acierto seguro es crear un rincón de estudio de sabor antiguo o alternar entre los sofás de líneas rectas un pequeño diseño de dos plazas de estilo Luis XV tapizado en una tela elegante y actual. Aunque, si prefieres una pieza más vanguardista, recurre a un clásico como es el confidente.



SI TU ESTILO ES… RÚSTICO

Los muebles rústicos destacan por su aire antiguo o envejecido, así como por el uso de materiales nobles y naturales poco tratados, como la madera con acabados a la cera o al aceite, el mimbre o cualquier otra fibra vegetal. Perfectos para casas de campo, puede resultar simples o sofisticados, según de los complementos.
Las alacenas con tela de gallinero son uno de los muebles más característicos del estilo rústico.

Alrededor del fuego

La chimenea es un elemento imprescindible del estilo rústico. En torno a ella se crean rincones de tertulia arropados por textiles coordinados tanto entre ellos como con las cortinas e incluso con el papel pintado de la pared. Los estampados suelen representar la naturaleza y la vida en el campo, así como cenefas florales de aire tradicional.

Sabor de ayer

La personalidad del mueble único y elaborado artesanalmente es el gran acierto de los salones de aire rústico, que reflejan una forma de entender la vida, que busca recuperar el sabor de la tradición y rodearse de objetos “vividos”. La madera maciza es el material por excelencia, ya que envejece con estilo, junto a la forja de hierro.

Aire provenzal

A menudo empleado como sinónimo del rústico, el estilo provenzal posee determinados matices que lo hacen más liviano y luminoso. Frente a los muebles macizos de fuerte peso visual, propone piezas más ligeras, aunque siempre con un toque artesano. También es más colorista, ya que apuesta por estampados frescos y vivos.

Personalizado

Eminentemente práctico, aunque sin por ello olvidar el confort, el estilo clásico y refinadas antigüedades como con piezas exóticas de aire colonial, por lo que resulta muy versátil y fácil de renovar.



SI TU ESTILO ES… COLONIAL

El mueble colonial es el resultado de la mezcla de culturas de Oriente y Occidente. Dos visiones que se funden  en piezas únicas y espectaculares. Concebido inicialmente como equipamiento de exterior, los materiales que lo componen proceden directamente de la naturaleza: madera, bambú, algas, cuerda, rafia…

Equilibrio formal

Aunque la calidez de la madera es vital en un salón colonial, conviene compensarla con otros elementos de acero o forja para evitar un entorno demasiado monótono. Basta aplicarlos en forma de pequeños detalles: remates en mesas o sillas, adornando sutilmente una lámpara… Ya sea en versión brillante o matizados.
Las piezas actuales de líneas rectas se avienen con la solidez y la elegancia de los muebles de sabor colonial.

Mestizaje cultural

La sobriedad, la innovación en el diseño, la pureza de líneas y la modernidad que aporta la cultura occidental, combinada con los materiales, las técnicas artesanales y los acabados exóticos propios de Oriente dan lugar a piezas de una estética exquisita, ricas en matices y con una fuerte personalidad. El resultado son ambientes relajados al tiempo que sofisticados y elegantes, perfectos tanto para estancias interiores como para salones al aire libre, ya que los muebles están realizados en maderas tropicales, como la teca, muy ricas en aceites naturales, que les confieren protección frente a la intemperie.

Textiles naturales

Para suavizar la robustez de este tipo de muebles, se aconseja utilizar textiles y complementos de colores pastel y tonos claros como el blanco y el crudo. Los tejidos naturales como el lino, la seda y las fibras vegetales son los más utilizados en el estilo colonial, sobre todo en acabados lisos o en diseños de rayas, más étnicos. Para las alfombras se proponen piezas tejidas a mano en materiales naturales y voluminosos como el yute, así como pieles de animales, que aportan una nota más exótica. Para las cortinas, las mejores son las livianas caídas, a la manera de las mosquiteras, que no interfieran en el paso de la luz.

Étnico CHIC

Si te gustan los muebles exóticos pero no quieres un ambiente totalmente integrado por ellos, apuesta por combinarlos con piezas como un sofá tapizado en piel de vaca rectificada y pigmentada con unas patas metálicas y estilizadas.



IDEAL PARA SALONES PEQUEÑOS

Cuando no sobran los metros, es necesario hacer un esfuerzo de planificación para aprovechar al máximo cada centímetro disponible. Existen muchas soluciones que permiten sacar el partido de rincones insospechados o doblar la capacidad de almacenaje. Es cuestión de imaginación y  practicidad…

Sofás y butacas

En un salón de dimensiones reducidas es fundamental no saturarlo con piezas voluminosas. Es preferible jugar con distintos tipos de asientos de líneas ligeras. Ten en cuenta la posibilidad de combinar butacas con sillas con brazos, pufs o bancos de obra.
Combina sofás con butacas y sillones ligeros para no cargar el espacio del estar.

Estanterías

En el salón se podrían diseñar dos estanterías empotradas en la pared: una solución ideal porque no “come” metros útiles. Para conseguir que las dos librerías se integren perfectamente en la estancia, se pintan con el mismo tono blanco de la pared. Para destacarlas, bastaría con darle un color diferente a los marcos y la trasera. Otra posibilidad es recurrir a diseños ligeros y prácticos como puede ser una biblioteca con doble fondo ofreciendo mayor capacidad de almacenaje.

Muebles de obra

De pladur, escayola, o albañilería… Los muebles de obra son una alternativa interesante en salones pequeños. Ten en cuenta que esta solución te permitirá dar una respuesta concreta a todos sus requerimientos de almacenaje (puedes combinar armarios con cajones o baldas, según tus intereses).

Ganar armarios

En un salón pequeño es importante tener piezas de mobiliario que nos aporten una gran capacidad de almacenaje. Un mueble bajo, o una estantería alta, entre dos pilares, te ayudarán a conseguirlo, sin restar amplitud visual al ambiente.
Gana espacio de almacenaje en vertical con baldas y estantes de formas decorativas.
Formas geométricas: Una forma sencilla y actual de aprovechar es espacio que ofrece la pared, sin saturarla, es con estantes y baldas de líneas geométricas.
Los sistemas modulares: Ofrecen una gran capacidad de almacenaje y se adaptan a las dimensiones del salón. En la actualidad existen diseños muy ligeros, concebidos para no recargar visualmente el espacio.

Dos funciones en una

Si no sobran los metros vale la pena en invertir en muebles polivalentes:
Mesas con secretos: Existen diseños que ofrecen una buena capacidad interior para revistas, libros, etc.
Baúl o arcón: Puede servir como botellero o para guardar las fundas o cojines de otra temporada.
Bancos de obra: Una buena forma de ganar asientos en un salón pequeño es diseñar un banco corrido a lo largo de una pared, con asiento elevable. Así podrás aprovechar el hueco interior como si de un armario se tratara.



DECORAR CON LA LUZ

El salón es el lugar de encuentro y relajación por excelencia de la casa. Por eso, requiere una iluminación estudiada que lo convierta en un lugar acogedor. Como regla habitual, hay que combinar de forma equilibrada la luz general, la de ambiente, suave y poco agresiva, y algunas fuentes de luz puntual que realcen zonas.

Iluminación cálida

El salón requiere una iluminación que refuerce la sensación de confort y sosiego. Para ello, opta por una luz general que parta de una lámpara central, luces de ambiente que se encarguen de aportar una mayor intimidad al estar y eliminen las zonas de penumbra y, por último, focos puntuales para zonas como el rincón de lectura o de despacho.

Ganar confort

Para paliar el cansancio visual que provoca ver la televisión, dispón una iluminación que suavice el contraste que se produce entre la luz emitida por el aparato y la oscuridad de la estancia y evite los reflejos de la luz en la pantalla. Iluminar el espacio situado tras el televisor o colocar una luz difusa enmarcando la pantalla plana son buenas opciones.

Crear ambiente

Las pantallas de las lámparas atenúan la intensidad de la luz incandescente y evitan deslumbramientos, al tiempo que ayudan a integrar la iluminación en la decoración del salón. Los materiales más habituales son el vidrio matizado, la tela, la seda, el cartón, el algodón, el lino, el plástico e incluso el papel, aunque también las hay de pergamino, rafia, etc.

Luz puntual

Para sacar el máximo partido a un rincón de lectura o trabajo, recurre a una luz puntual que ilumine de forma directa la zona. Las lámparas de sobremesa y las de pie, articuladas o no, son la mejor opción en este caso.
Los leds ofrecen un óptimo rendimiento con bajo consumo.

Iluminar el comedor

Para iluminar correctamente el comedor, lo mejor es optar por la luz directa en forma de lámparas de techo que alumbren la mesa sin molestar a los comensales y no produzcan sombras. Para ello, elige modelos con pantallas opacas o matizadas que eviten deslumbramientos y procura que quede alrededor de 80cm. por encima de la mesa para que nadie pueda golpearse por ponerse de pie. Si la mesa es redonda, te bastará con una sola lámpara, pero si es alargada es posible que necesites más de una.



GANAR LUMINOSIDAD

La luz natural es un lujo en decoración, pues logra recrear atmósferas frescas y naturales, que irradian energía y optimismo. Aunque las entradas de luz son las que son, hay muchos trucos y soluciones que permiten potenciar la luminosidad, tanto con los colores como con los materiales del mobiliario o los revestimientos.

Tonos claros

La gama cromática es la clave para multiplicar la luz de una estancia: elige colores claros  en la gama de los tostados, crudos o blancos rotos, tanto en las paredes como en las tapicerías. El blanco puro, a pesar de ser el color que mejor refleja la luz, no está recomendado en estancias sombrías, pues provoca sensación de frialdad.
Potencia la luz natural con muebles que la reflejen, como lacados en brillo, metales, cristal…

Ventajas libres

Se trata de dejar libre el paso de los rayos del sol, así que conviene mantener las ventanas o balconeras despejadas. Si tienes que poner delante de la cristalera un sofá, elige un modelo de respaldo bajo. A la hora de elegir las cortinas o visillos, decántate por tejidos livianos como el hilo, la organiza o la seda, que apenas tamiza la luz.

Piezas bajas

Para conseguir que la luz llegue hasta el último rincón del salón, resulta eficaz decantarse por un mobiliario ligero y, sobre todo, de baja altura. Son muy prácticas las librerías sin trasera, las mesitas auxiliares de tijera o con las patas metálicas o los sofás de líneas rectas elevados sobre patas, mesitas nidos y piezas multiuso. Si necesitas espacio para mobiliario importante, como una biblioteca o un armario, adósalos siempre a las paredes más grandes de la estancia, de esa manera no entorpece el paso de la luz. Si puedes, píntalos o lácalos del mismo color que la pared.

Suelo brillante

El pavimento juega un papel clave. La luminosidad de los tonos claros se verá multiplicada si eliges un material pétreo o cerámico en acabado brillo, pues conseguirás un interesante efecto espejo. Puede ser un mármol en color marfil, un granito gris perla o un porcelánico pulido en un tono crema.

Buenos aliados

Cristal: Tanto en su versión transparente, como translúcida. Lo puedes utilizar en las mesas, de centro o auxiliares, pero también en las puertas, para que la luz fluya entre estancias.
Lacados: La superficie brillante de la laca consigue reflejar muy bien la luz, especialmente en el caso del blanco.
Forja y acero: Las piezas de hierro o metal transmiten una gran sensación de ligereza pero también de frialdad, al tiempo que permiten el paso de la luz.
Algodón, piel y fibras: Estas fibras consiguen ambientes frescos y muy  naturales.



DISEÑAR EL COMEDOR

¿Independiente o compartiendo estancia con el salón o incluso con la cocina? ¿Clásico, contemporáneo, rústico, colonial? Varias son las cuestiones a abordar antes de decidir el equipamiento definitivo. Te damos las claves para acertar.

Independiente

La mejor opción para comedores de sabor tradicional, la principal ventaja de destinar una habitación exclusivamente a este uso es que no debe compartir estilo con ninguna otra zona. No obstante, hay que tener en cuenta que, en pisos en los que no sobran los metros, cuanto mayor es la compartimentación por estancias, menor es el tamaño de éstas.

Compartido

Sin duda, el principal aliciente de que comedor y salón compartan un mismo espacio es la sensación de amplitud que se genera al evitar tabiques y separaciones. Para mantener la identidad de uno y otro espacio aunque compartan estilo, aprovecha recursos arquitectónicos como arcos o pilares, muebles que funcionen como separadores o los puedes disponer de forma que se cierren sobre sí mismos.

Es tendencia

Aunque no sea algo nuevo, ya que antiguamente lo tradicional era que el comedor se encontrará dentro de la propia cocina, una de las corrientes más fuertes en el interiorismo actual es diseñar el comedor compartiendo estancia con la cocina. Resulta más cómodo a la hora de las comidas, le da un carácter lúdico a su preparación cuando se tienen invitados y hay programas de mobiliario de cocinas en cualquier estilo decorativo.

Cuestión de estilo

Además de una cuestión de gusto personal, el estilo del mobiliario dependerá también del espacio disponible. Y es que, si se tienen pocos metros, es recomendable elegir muebles de líneas rectas y poco voluminosos, así como centrarse en los elementos esenciales. De hecho piezas más majestuosas, propias de un comedor clásico, en el que las protagonistas son las sólidas estructuras de madera maciza tallada con motivos florales y acabado dorado, sólo son aconsejables cuando no hay problemas de espacio.

A doble altura

Una manera de disfrutar de la amplitud que confiere un comedor que comparta estancia con el salón manteniendo al mismo tiempo su propia independencia es situarlo en un nivel más elevado que el anterior.



AMUEBLAR EL COMEDOR

Si bien las piezas fundamentales son la mesa y las sillas, hay algunos elementos, como los aparadores, las vitrinas o los carritos de servicio que harán más cómodo y funcional el comedor. Al elegirlos, considera su capacidad, dimensiones y estilo.

Aparadores

Los bufés tienen su origen en Francia en el siglo XVIII. El nombre hace referencia al aparador sobre el que se le ponía la comida para ser servida al público. Es por eso que suelen ser de una altura similar a la de la mesa, por lo que resultan perfectos para ofrecer una adecuada capacidad de almacenaje en el comedor y, además, una superficie libre adicional que ayude en el servicio de mesa.

Capacidad

Antes de decidir el número de piezas de mobiliario que dispondrás en el comedor, ten presente que debes dejar pasos cómodos entre ellos, de al menos 90cm. Asimismo, al elegir la mesa y las sillas, calcula que, para que los comensales estén cómodos, deben disfrutar de un hueco mínimo de unos 50cm. de ancho.

Bien delimitado

Una alfombra que enmarque la zona de la mesa y las sillas no sólo  dará calidez a este ambiente, sino que mejorará su comodidad. Al seleccionarla, ten en cuenta que sobresalga lo suficiente para que las sillas no queden fuera al retirarlas de la mesa y procura que sea de un material lavable. Los modelos de lana son ideales para ambientes clásicos, y los de fibras vegetales, para los actuales.

Bien equipado

El comedor clásico, heredero de una época en la que no había problemas de espacio, incluye, además de la mesa y las sillas, un aparador bufé para el servicio de mesa y una vitrina alta para exponer la vajilla y la cristalería.

Una vitrina para cada casa

No sólo son los elementos más decorativos del comedor gracias a sus frentes de cristal, sino que presentan la clara ventaja frente a otros elementos como las estanterías de que, al ser cerradas, impiden la entrada de  polvo y los objetos guardados en su interior están protegidos. No obstante, las clásicas vitrinas de madera y cristal, que siguen ocupando un lugar preferente en los interiores más tradicionales, no encajan en las viviendas más vanguardistas. Por lo tanto, ha sido necesario adaptar este mueble a los tiempos que corren y los gustos actuales.


LA MESA IDEAL

Centro neurálgico del comedor, en torno al que se organiza todo, la mesa ideal es la que se adapta tanto al número de comensales que deba albergar como al espacio disponible. Analizamos las formas, materiales y los diseños más versátiles.

Participativa

La mesa redonda es la más dinámica y la que mejor fomenta las conversaciones entre los comensales, sobre todo porque no tiene cabeceras y el centro está al alcance de todos por igual. No obstante, los modelos de mayor capacidad ocupan mucho espacio y, a la hora de servir la comida, puede llegar a resultar algo complicado.

La más popular

La mesa rectangular es la más popular, ya que permite albergar una gran cantidad de personas y resulta más cómoda en pequeños espacios, ya que se puede adosar a una pared. En cuanto a las cuadradas, combinan las características de las redondas con la practicidad de los ángulos rectos, al tiempo que son más actuales.

Formas ligeras

Los nuevos materiales y métodos de fabricación permiten realizar piezas de diseños sinuosos como podría ser una mesa con base realizada en Cristalplant, una resina termoplástica con cargas minerales y sobre de mármol.

Mesas extensibles

Las mesas plegables o extensibles son perfectas tanto en el día a día como en ocasiones especiales, cuando el número de comensales aumenta. Existen diversos mecanismos de pliegue, extensión y apertura que conviene analizar.
Las hay que incorporan un sobre partido por la mitad, asentado sobre rieles, de modo que se separan las dos partes cuando queremos abrirlo y en el centro aparece un suplemento para ampliar las superficie, un mecanismo adecuado para mesas redondas y ovaladas. En el caso de las rectangulares, una opción similar son las alas en los extremos. En modelos cuadrados, destacan las mesas de libro, con un tablero doble plegado, que duplica la capacidad del mueble cuando se abre.



TODAS LAS SILLAS

A la hora de adquirir las sillas del comedor, deber combinar más que con ningún otro mueble funcionalidad, comodidad y equilibrio. Analiza el espacio de que dispones, el estilo que más te gusta y decide cuál de estos modelos te encaja mejor.

Buenos materiales

Hoy día, la gama de materiales en los que se fabrican las sillas es muy amplia: maderas, metales, polipropileno, piel  y tapicerías son algunos de los más habituales. De la combinación de estos materiales nace una silla adaptada a cada espacio y ambiente.

Para gustos, colores

Si se combina una mesa de comedor con sillas diferentes, hay que utilizar un hilo conductor para crear el conjunto.

Tapizadas

Cuando un comedor comparte espacio con el salón o un rincón de estar, las sillas más recomendables son las de asientos y respaldos tapizados, también las más cómodas. Las sillas de comedor altas y tapizadas en tejidos  claros configuran un estilo elegante; en cambio, las de tela estampada y respaldo abierto van mejor para un comedor informal.

Clásica y actual

Además de estar de plena moda, las sillas transparentes aligeran la decoración de la estancia. Asimismo, se adaptan a cualquier ambiente de forma natural, ya que hay modelos que incluso reproducen diseños antiguos como los clásicos Luis XV.

Extra de confort

Inventadas en  Francia en el siglo XVIII, las sillas con brazos tienen más presencia, además de ser más confortables. Puedes colocarlas en las cabeceras de las mesas de comedor rectangulares u ovaladas y tienen la ventaja añadida de que pueden llevarse a cualquier rincón de la casa: el recibidor, el salón, el dormitorio o en el vestidor.
Alternar distintos modelos de sillas en torno a la mesa aporta dinamismo y un aire informal  a la composición.

Apilables

Perfectas para disponer de una buena cantidad de asientos en espacios pequeños, las sillas apilables diversifican sus diseños y materiales. Pueden ser de tela, piel, plástico o cuero rectificado.



TOQUES DE ESTILO

¿Qué es lo que hace que una casa rezuma estilo por los cuatro costados o bien sea completamente anodina? Seguramente en ello tiene mucho que ver el amor por los pequeños detalles, por aquello que no salta a primera vista, pero que se aprecia en el conjunto. Te damos algunas claves para dar un toque único a tu salón.

Alfombras singulares

Las alfombras se han utilizado desde tiempos inmemoriales para abrigar el suelo y crear un ambiente más envolvente. Pero además de su aspecto funcional, juegan un papel fundamental en la decoración. Además de los modelos clásicos y elegantes, se encuentran diseños muy actuales, firmados por artistas reconocidos. Poner un toque de contraste con una alfombra singular, permite dar un giro espectacular a la decoración.

Obras pictóricas

Cuando se trata de personalizar un ambiente y darle un estilo propio, un recurso infalible consiste en decorar con obras pictóricas. En este sentido, es importante elegir bien el marco, que debe estar en consonancia al estilo del cuadro. En ambientes actuales, es posible exponer las obras de gran formato apoyadas en el suelo, lo que permite variar su ubicación fácilmente. Otra posibilidad es decorar con fotografías. Aprovecha para unir varias de un mismo estilo y crear una composición armónica y efectista. Las fotos en blanco y negro garantizan un plus de estilo.

Cojines y plaids

Elegir una tapicería lisa en un color claro para los sofás de salón nos garantiza un fondo neutro para poder disponer las notas de color y contraste en los complementos decorativos y textiles. Poner énfasis en los detalles pequeños, en lugar de en las piezas grandes, contribuye a lograr un ambiente sereno y equilibrado, sin perder un ápice de dinamismo. En este sentido juegan un papel destacado, los cojines y plaids. Aquí se puede ser excesivo, combina varios lisos y estampados, y de diferentes texturas. Pondrán un toque cálido en el salón.
Cómodas singulares: Hay piezas de mobiliario que ponen el toque único y singular en un ambiente. Piezas antiguas, muebles recuperados y a los que hemos dado un nuevo acabado o diseños sorprendentes que reinterpretan los diseños clásicos, pero los actualizan con el color.
Espejos: Elige uno con el marco especial para realzar una zona de paso o un rincón desaprovechado.
Iluminación teatral: Los puntos de luz son muy importantes, para realzar el estilo decorativo del salón. No obstante, siempre se puede destacar una zona de lectura o descanso con una iluminación singular.



ESTILO EN LAS PAREDES

El envoltorio de un espacio, esto es, las paredes, marcan de forma importante la decoración del salón. Con pintura, papeles pintados, frisos, zócalos, etc., el acabado de las paredes crea una riqueza decorativa de primer orden y sirve para complementar el aire que queremos darle a un espacio. Los nuevos acabados de pintura decorativa facilitan una labor que antes era artesanal.

Papel pintado

Las paredes ofrecen un montón de posibilidades para enriquecer decorativamente el ambiente del salón. Podemos cederle todo el protagonismo, eligiendo un papel pintado exuberante. En estos casos conviene decantarse por tapicerías lisas, que contrarresten su peso visual. Ten en cuenta que el pintado vuelve a vivir una época de esplendor, por lo que las firmas tienen un sinfín de propuestas en múltiples estilos, desde los más clásicos a los más modernos, firmados por artistas o diseñadores.

Frisos

Para proteger la parte inferior de la pared de las rozaduras o los posibles golpes, una buena idea es crear un friso decorativo. A la hora de diseñarlo tienes bastantes posibilidades: se pueden combinar dos tipos de papel distintos, estampado y liso. Esta combinación resulta especialmente atractiva, por el acierto en el coordinado y porque el tramo liso en un tono más sobrio como es el gris “aligera” visualmente el conjunto. Además del papel, el friso se suele realizar con lamas de madera (barnizada, pintada o lacada) i con telas resistentes (como la arpillera o la franela).

Pintura decorativa

Otra alternativa para “vestir la pared” se encuentra en las diferentes técnicas de pintura decorativa. Estucos y veladuras consiguen matices y texturas que dan una gran riqueza a la pared, de forma que ésta adquiere un protagonismo inmediato. Existen muchas opciones, desde las que descansan en la aplicación artesanal basada en técnicas tradicionales –que resulta muy elaborada y por tanto, costosa económicamente- a las nuevas fórmulas, que vienen preparadas de serie por el fabricante, de forma que han abaratado considerablemente su coste final.

Mural personalizado

Si de personalizar se trata, hay que hablar de la posibilidad de imprimir cualquier fotografía que nos guste, de nuestro propio álbum, sobre un revestimiento de papel. Esa foto personal se puede convertir en un gran mural con el que poder revestir una zona del salón o el comedor.

Fuente:  Casa y Jardín
Más información:  www.baixmoduls.com

Consejos prácticos para salones comedores modernos Parte-1

Consejos prácticos para salones comedores modernos Parte-1


Parte 1 Pasos a tener en cuenta para la eleccion, diseño, distribucion y decoracion de un salón comedor moderno.

A TENER EN CUENTA

El salón ideal no sólo debe ser capaz de albergar grupos numerosos cuando se tienen invitados, sino que tiene que resultar igualmente acogedor cuando se usa de forma más privada. De ahí  que, antes de lanzarse a comprar muebles, sea indispensable realizar un importante análisis previo, tanto del espacio disponible y su planta como de nuestras necesidades.

Analiza el espacio

Para aceptar con la elección de los muebles más adecuados, los expertos aconsejan medir el hueco disponible y probar distintas colocaciones. Para ello, podemos optar por el clásico esquema a escala realizado en papel cuadriculado o por un programa informático con simulador de ambientes, que nos permite hacernos una idea muy realista del efecto final. Cada vez son más las firmas de muebles y materiales, así como  las grandes superficies especializadas, que ofrecen este tipo de herramienta informática en sus páginas web de forma gratuita y con fácil manejo.

Dónde colocarlo

Conviene situar la zona de estar en una estancia con abundante luz natural y, siempre que sea posible, con vistas al exterior. Las aperturas más grandes, como puertas balconeras y ventanales, deberían orientarse hacia el Sur (a mediodía), para garantizar un buen número de horas de sol cada jornada. Un porche-combinado con contraventanas-, o incluso un toldo, mantendrán fresco el interior en verano.

Amplitud visual

Para un salón multifuncional, escoge muebles  versátiles, ligeros y fáciles de trasladar.
En el salón, es importante crear una armonía espacial que permita un uso cómodo y no dé la sensación de que el espacio está saturado. Ten en cuenta que un ambiente despejado y con superficie libre siempre se ve más amplio que uno abarrotado de cosas, sean cuales sean sus dimensiones. Para ello, respeta un mínimo de 85cm. para las zonas de paso y coloca las librerías y muebles altos pegados a las paredes, para no comprometer la sensación de profundidad.

Espacio multifunción

A su papel tradicional como centro de reunión, el salón ha añadido nuevas funciones que incrementan las exigencias en cuanto a su equipamiento.  Elementos versátiles y de doble uso como pueden ser unas mesas auxiliares más unos pequeños taburetes, convierten el ambiente en zona de dibujo para niños. Son los aliados perfectos para crear distintos escenarios según el momento y ofrecer una sensación visual de amplitud incluso en las estancias con menos metros.


UN BUEN MARCO

Cambiar el acabado de las paredes es una de las maneras más efectivas de dar un aire totalmente diferente a la casa sin que se dispare el presupuesto. Además de los colores estándar, la mayoría de las firmas de pintura ofrecen la posibilidad de mezclar el tono que se desee a medida, lo que permite realizar ambientes coordinados con las cortinas, las tapicerías o los accesorios.

Pinturas al agua

La pintura plástica, la más habitual para revestir las paredes, es económica, fácil de aplicar- hay versiones mono capa, que ahorran esfuerzo- y las pocas herramientas que requiere se lavan simplemente con agua. Igualmente, los esmaltes acrílicos resultan adecuados para pintar puertas, ventanas y zócalos, ya que ofrecen una resistencia similar a la de las versiones sintéticas sin las molestias de los disolventes.

Herramientas prácticas

A veces es difícil imaginar si el color que nos gusta quedará bien. Para ello, conviene pedir muestras de buen tamaño en el tono real elegido para llevárselos a casa, colgarlos en la pared y comprobar el efecto. Una alternativa igualmente práctica son las aplicaciones informáticas interactivas para probar los colores en cada habitación a partir de fotos reales  de tu propia vivienda.

Pintura decorativa

Los nuevos productos en pasta para realizar estucos que simulan los clásicos venecianos, pulidos y de tacto sedosos, son ideales para crear una atmósfera elegante y sofisticada en las zonas de día de toda la casa. Así mismo, existen otras variedades de pastas con texturas para realizar efectos como trapeados, marmoleados, esponjados, arenados, etc., que ayudan, además, a disimular irregularidades en las paredes.

Acento de color

Los colores intensos, si bien son capaces de crear entonos de gran fuerza escénica, pueden llegar a saturar un ambiente, por lo que se aconseja dosificarlos, combinándolos con neutros y tierras para lograr resultados más serenos.

Diferenciar zonas

Para aportar dinamismo a un ambiente sin renunciar a la  sobriedad de los arenas y tostados, prueba de combinarlos con tonalidades más ricas, como el tabaco o el marrón chocolate. Si prefieres una composición más serena y delicada, aunque no por ello menos actual, apuesta por los rosas amaderados y los malvas en sus versiones más modernas y desenfadadas. A medio camino entre la pintura y el papel pintado, apuesta por un mural XXL.

Papel pintado

Práctico y muy decorativo,  el papel pintado vuelve a estar de moda y viste los ambientes más chic. Las tendencias apuestan por motivos florales, rayas, texturas y propuestas de murales en grandes formatos, con un hueco especial para los diseños clásicos y recuperados de las mansiones de principios de siglo pasado. Si te decides a ponerlo en casa, opta por uno con base de tejido no tejido (non woven) ya que es muy fácil y limpio de instalar, puesto que sólo hay que encolar la pared.

Efectos decorativos

Flores, plantas, animales, palabras, figuras geométricas… Cualquier motivo es bueno para dar un toque diferente y moderno a una pared pintada en un color liso o centrar la atención en un rincón concreto. Para ello, nada más fácil que colocar unos vinilos adhesivos de sencilla instalación.

Realzar un elemento

Una acertada  selección de colores tiene efectos sobre los volúmenes. Así, los techos de tonos algo más oscuros que las paredes tienden a ensanchar las estancias, mientras que los claros y blancos aportan más altura. Igualmente, enmarcar una zona concreta en un tono más oscuro de la misma paleta del resto de las paredes ayuda a realzar un elemento determinado.


ZONA DE TERTULIA

Antes de iniciar la búsqueda del sofá ideal, analiza el espacio en el que se ubicará, que será el que determine las medidas más adecuadas y la forma que mejor se adapte al mismo. Además, este mueble debe tener el  tamaño adecuado para sus usuarios habituales: entre 60 y 75cm. de profundidad de asiento, de 80 a 90cm. de altura de respaldo y entre 12 y 25cm. para los brazos.

Exento o adosado

Las propuestas de formas geométricas y volúmenes impactantes están especialmente indicadas para su colocación exenta, de modo que se convierten en la pieza clave del salón. No obstante, esta disposición requiere espacios despejados, por lo que en estancias pequeñas es mejor adosar  el sofá a una pared.

En paralelo

Un factor decisivo en la distribución de la sala de estar son las vistas hacia el exterior. La colocación de los sofás en paralelo es una opción muy atractiva visualmente, sobre todo en estancias amplias en las que el salón comparta ambiente con el comedor.
La colocación del sofá en línea, adosado a una pared, es la que menos espacio libre requiere.

Recogido y acogedor

Cerrar la zona de tertulia sobre sí misma no sólo la independiza frente a otras áreas de uso dispuestas en la misma habitación, sino que le da una atmósfera más intimista y acogedora. Además de la propia disposición de los sofás, butacas y otros asientos, algunos recursos útiles y que apenas requieren espacio son enmarcarla con una alfombra de buenas dimensiones y disponer una iluminación ambiental mediante lámparas de sobremesa o de pie.

En torno a

Elegir un elemento en torno al que distribuir la sala de estar ayuda a diferenciarlo visualmente dentro del espacio. Un clásico que nunca deja de ser efectivo es disponer de asientos frente a una chimenea. Si se elige un modelo de chimenea depurado y actual, no sólo dará calidez en invierno, sino que se puede fijar a la pared una pantalla plana de televisor sobre él.

En “L”

Dos sofás dispuestos de forma perpendicular, formando una “L”, resultan muy adecuados para estancias de planta cuadrada. Una alternativa similar para salones rectangulares de estética moderna, o para aquellos cuya anchura impide colocar dos sofás en “L”, son los modelos rinconeros o con chaise longue.


ELEGIR EL SOFA

La elección del sofá debe considerar aspectos claves como la ergonomía o el uso que se hará de él: no es lo mismo una composición de tertulias numerosas que uno destinado a leer, ver la televisión o relajarse en solitario. De ahí que proliferen los modelos multifunción, con respaldos y brazos reclinables o abatibles, que convierten el sofá en un elemento adaptable.

Más que asientos

Los sofás compactos, realizados en una sola pieza, suelen presentar volúmenes y dimensiones contenidas, por lo que son aconsejables en espacios reducidos. Mención aparte merecen, en este sentido, las propuestas convertibles en camas.

Personalizable

Las propuestas modulares destacan por la gran cantidad de elementos que integran- asientos centrales, remates con o sin brazos, módulos rinconeros, chaise longues, pufs, e incluso auxiliares como mesitas, estanterías, etc.- en todo tipo de acabados, para realizar composiciones personalizadas y a medida.


TOMA ASIENTO

Como el sofá es una de las piezas más voluminosas del salón, es preferible elegirlo con un acabado neutro, en una tapicería lisa y clara, que se integre en  el ambiente. A la hora de completarlo con otros asientos, opta por butacas, chaises longues y pufs en la misma gama, si se trata de un espacio pequeño, o en tonalidades más intensas, para aportar dinamismo al conjunto.

Muebles versátiles

Cuando no sobran los metros, opta por piezas de mobiliario de dimensiones contenidas pero que, al mismo tiempo, ofrezcan un buen número de plazas de asiento y , a ser posible, capacidad de almacenaje.

Tres en uno

Los muebles convertibles son los grandes aliados de un salón multiusos. Además de los sofás cama convencionales, cada vez son más las propuestas de butacas -e incluso pufs- que pueden funcionar como una cama individual.
Si quieres que una butaca sea protagonista, elige un diseño escultórico en un tono vibrante.


MODULARES

Los sistemas modulares de mobiliario integran elementos para todo tipo de usos, desde los huecos destinados a albergar el televisor y otros elementos multimedia hasta librerías, vitrinas y armarios. La tendencia apuesta por diseños depurados y ligeros, al tiempo que los frentes correderos y escamoteables ocultan o muestran las distintas zonas de uso según el momento.

Bien integrado

Una de las corrientes más marcadas en los nuevos muebles para el salón es la horizontalidad de los diseños. La escasa altura de los módulos bajos dota a la biblioteca de una ligereza visual, mientras que el módulo de estanterías empotrado, que puede cerrarse o dejarse totalmente abierto, ofrece un amplio espacio para libros.

Clásico

Un diseño delicado y elegante, perfecto para ambientaciones clásicas, que esconde una notable funcionalidad gracias a sus distintas puertas- ciegas y acristaladas-, cajones y estantes que lo convierten en vitrina, librería y mueble para el televisor.
Los elementos de instalación volada y formas geométricas son una tendencia al alza.

A medida

Los completos programas de mobiliario no sólo proporcionan una oferta siempre creciente de módulos por dimensiones- con varias alturas, anchuras y profundidades distintas para cada elemento-, sino también de acabados, con lo que las posibilidades creativas son inacabables. La versatilidad de los nuevos sistemas modulares para el salón ha llegado a tal punto que ya es posible realizar composiciones prácticamente a medida.

Panel mural

Un diseño compacto y de estética liviana pero con buena capacidad para albergar los equipos audiovisuales, almacenar CD y DVD y colocar todo tipo de pequeños elementos decorativos en las baldas regulables de vidrio translúcido que se instalan en las ranuras del panel trasero.

Acabados

Se mantiene la tendencia decorativa hacia las superficies lacadas, tanto en acabado brillante como mate. Así, a pesar de que los protagonistas continúan siendo el blanco y el negro- junto con las chapas de maderas-, el color gana posiciones, ya sea en forma de pequeños detalles o como protagonista absoluto del mueble. La posibilidad de lacar los módulos elegidos en una paleta cromática casi infinita permite realizar diseños personalizados al gusto del usuario final.


ACCESORIOS CLAVE

Los muebles auxiliares juegan cada vez un papel más importante en el salón, a medida que se reduce el espacio y se incrementan las necesidades de uso. Así, por ejemplo, las mesas nido se renuevan con diseños apilables, alturas a ras de suelo y materiales de última generación y conviven con diseños tipo mecano, que pueden unirse o separarse, propuestas elevables o modelos para encajarse con el sofá y no ocupar espacio.

Básicos

Vitales para mantener el orden, como las estanterías, necesarios para distintos usos, como las mesas bajas, o pensados principalmente para aportar calidez al ambiente, como las alfombras y los cojines, lo cierto es que los elementos auxiliares a menudo resultan básicos en un salón. Mención aparte merecen, en este sentido, los módulos high-tech, que reúnen en una estructura muy compacta, y generalmente móvil, los nuevos televisores de pantalla plana y los demás equipos, ocultando las conexiones. Y, más allá de su utilidad práctica, no hay que olvidar su componente estético, ya que, a menudo, estas pequeñas piezas son las encargadas de aportar color, elegancia o impacto visual.


VESTIR EL SALÓN

Elegir las cortinas y tapicerías más adecuadas no es sólo una cuestión estética, sino también de practicidad. Resistentes, confortables, inalterables, atractivos y fáciles de mantener. Así deberían ser los tejidos idóneos para decoración. Para reconocerlos, deberás atender a su composición y sus diseños.

Detalles de estilo

La forma más simple de actualizar las telas de una habitación es con los complementos. Renovar las fundas de los cojines, coordinar éstas con algún accesorio como una lámpara o unos marcos y rematar el conjunto con un plaid a juego es más que suficiente.

Coordinado

Los estampados florales, las rayas y las cenefas geométricas de aire tradicional son muy adecuados para ambientes clásicos. La coordinación de distintos estampados es clave en este tipo de ambientaciones, siempre siguiendo una misma paleta de colores para unificar el conjunto.

Las mejores  telas

La estructura de la tela es la que determina su resistencia al desgaste, independientemente de su grosor, por lo que debes comprobar que se trate de tejidos apretados y con un buen equilibrio entre urdimbre y trama. Además, procura que sean lavables en casa y fáciles de manejar.

Cortinas

Tanto si te gustan las cortinas gruesas y tupidas como los visillos ligeros, opta por tejidos que presenten una buena caída, como el lino o el algodón, con composiciones que resulten resistentes a la acción de la luz del sol.


RINCONES ÚTILES

Disfrutar de una zona de despacho, una relajada área de lectura o una pequeña biblioteca dentro del salón no sólo es una manera de rentabilizar los metros de la estancia, sino que permite que distintos miembros de la familia puedan desarrollar diversas actividades en un espacio común simultáneamente.

Para leer

Un sillón o butaca- mejor con reposapiés, para poder reclinarse- y una lámpara de pie es cuanto necesitas para crear un rincón de lectura. Colócalo próximo a una fuente de luz natural y prevé alguna superficie auxiliar para dejar el libro, las gafas, etc.

Estudio

Si quieres utilizar incorporar un rincón de estudio en la sala de estar, procura que se integre en el conjunto de la decoración.

Con capacidad

Para mantener ordenado papeles y facturas, conviene dispones de cajones o books.

Distribuidor

Rentabiliza una zona de paso mediante estantería poco profunda (25cm. Son suficientes para los libros más habituales) que sirva de biblioteca. Para que no sature el ambiente, recurre a un modelo a media altura y combínalo con un estante volado que funcione como superficie auxiliar y decoración.

Separadores

En estancias amplias y despejadas, una forma tan efectiva como decorativa de separar zonas de uso es mediante biombos u otros elementos estructurales.

Para ver la televisión

Si no quieres que la pantalla del televisor presida el salón, opta por situarla en un rincón apartado. Existe una gran variedad de módulos para colocarla, de líneas depuradas y casi invisibles, o incluso versiones con puertas y paneles que la ocultan cuando no está en uso.
Un mueble singular, o de un estilo distinto al conjunto, resulta ideal para diferenciar rincones.


PIEZAS SINGULARES

El mueble y los complementos decorativos han entrado en la vertiginosa rueda de la moda, con colecciones que se renuevan una y hasta dos veces por temporada. Las tendencias se imponen en cuanto a variedades de maderas, acabados y colores…, pero es importante salvaguardar algún espacio para dar a la casa una personalidad propia que la diferencie del resto.

Colorista

Cuando se siguen las tendencias al pie de la letra se corre el riesgo de crear un ambiente que parezca salido de una serie. Para superar este hándicap, basta con elegir  una pieza especial, con carácter propio.

Nuevo clásico

Una solución consiste en crear pequeños rincones con piezas de mobiliario capaces por sí mismas de focalizar todas las miradas. Así, en un salón actual es posible configurar una zona de lectura singular, que contraste y eleve la decoración.

Neobarroco

Si apuestas por los ambientes depurados, es importante seleccionar bien las piezas dotas de una alta carga decorativa, pues de lo contrario la atmósfera puede resultar recargada. Los toques puntuales son una apuesta segura.

Texturas

Los revestimientos tienen un papel de suma importancia a la hora de imprimir carácter a la estancia. Desde las veladuras rústicas, a los elegantes estucos, pasando por los estampados del papel pintado, que permiten jugar con todos los estilos… Entre todos ellos, uno de los más lujosos y espectaculares es el mosaico de vidrio que convierte las paredes en un lienzo en blanco donde crear verdaderas obras de arte.

Contrastes

Los tejidos permiten combinar estampados, colores y texturas, con lo cual resulta fácil recrear rincones “diferentes”. Para ello se puede jugar con el contraste o lo inesperado. Así, una buena idea, en un salón neutro, sería destacar las butacas o banquetas con un tejido especial (seda, piel, terciopelo…) o un color intenso.
Las piezas que contrastan ayudan a crear focos de interés.


BIEN ILUMINADOS

La planificación es la clave a la hora de acertar con la iluminación. En el salón comedor, deberás contar con una luz general, y complementarla con puntos de luz ambientales, para crear distintas atmósferas en función del momento del día. Lo ideal es planificar dónde irán las lámparas en una primera fase de proyecto, para poder hacer las obras y regatas pertinentes.

Luz general

Los puntos de luz ambientales determinan la atmósfera de cada espacio. En el salón, la opción más habitual consiste en disponer una lámpara de sobremesa a ambos lados del sofá principal; no obstante, también se puede recurrir a fórmulas distintas, como la combinación de una lámpara de pie con una de mesa o la colocación de varias lámparas suspendidas sobre la mesa de centro.

Ambiental

Hoy día, se hallan lámparas de diseños esculturales que contribuyen a poner una nota decorativa en el ambiente. La mayoría de las firmas presentan el mismo modelo en varios formatos (de pie, sobremesa, suspensión, focos, etc.), lo que permite dar unidad al conjunto, si se instalan varias de ellas en la misma estancia.


COMEDORES CON ESTILO

Lo más importante es encontrar el estilo con el que te sientes cómodo o identificado. Te damos algunas sugerencias:

Minimalista

Apuesta por el estilo minimalista, si tienes un espacio reducido o te gustan los ambientes  limpios y depurados. Minimalista no es sinónimo de sencillez. Es en las piezas más puras, cuando se ven realzados el diseño y las líneas.

Contemporáneo

El estilo contemporáneo abarca un buen número de tendencias, pero todas coinciden en la busca de la funcionalidad y el toque “chic”. Uno de los materiales estrella es, sin duda, la laca. Los lacados se encuentran en una amplia gama de colores, en  acabado brillante o mate.

Provenzal

Un estilo que no pasa de moda es el provenzal, que proporcionan unos ambientes cálidos y luminosos. Sus señas de identidad son las piezas de madera robustas, pero en acabados en decapé y en colores claros, que les restan peso visual.

Ecléctico

La creatividad y la singularidad son las claves que conducen a un diseño ecléctico. Esto es, que no responde a  ninguno de los cánones establecidos. Generalmente, se basa en la mezcla de piezas de diversos estilos en busca de una plasticidad personal y con carácter. En la mayoría de las ocasiones se juega con el factor “inesperado”, al encontrar unidos, piezas que generalmente no lo estarían por el contraste de materiales, estilos o colores.

Clásico

El orden reina en los ambientes eminentemente clásicos, con piezas de líneas trabajadas y realizadas en materiales de calidad. Las molduras, las formas curvas, los espejos y los tapizados de tejidos nobles y ricas texturas forman parte intrínseca del estilo. No obstante, las firmas avanzan nuevas propuestas que ayudan a actualizarlo. El gusto por los ambientes luminosos lleva a sustituir las maderas oscuras por otras patinadas o lacadas en tonos más suaves.
La tendencia lleva a combinar piezas de distintos estilos.


ELEGIR LA MESA

Antes de elegir la mesa,  hay que tener clara la ubicación del comedor; para que resulte cómodo, lo ideal es situarlo lo más cerca posible de la entrada, de forma que el recorrido con los platos sea el más corto. Ten en cuenta también el espacio disponible.

La mejor ubicación

Si tienes previsto colocar la mesa junto a la pared, ten en cuenta que deberás respetar un espacio libre de al menos 100cm., para que los comensales puedan entrar y salir con comodidad. En la mesa calcula que cada persona necesitará como mínimo 65cm., y alrededor de 45cm. al frente. En cuanto a la altura, la ideal es de unos 75cm., acompañada de una silla de 40cm.

Extensibles

La mesa del comedor debe adaptarse a las dimensiones de la sala, de lo contrario pueden dar una sensación de excesivo abarrotamiento. Si no sobran los metros, la opción ideal la presentan las mesas extensibles; que se encuentran en distintos sistemas( tanto de apertura lateral, como central).


SILLAS

Elígela en función del estilo del ambiente. Para ello lo mejor es que te fijes en el material: las sillas tapizadas aportan una nota de calidez a la estancia y permiten jugar con el color y las texturas. Además de la madera, se llevan las de metal y polipropileno.

Tapizadas

Ten en cuenta que las sillas con brazos resultan cómodas, pero ocupan más espacio que los modelos sin ellos; asimismo, asegúrate que los reposabrazos no superan la altura de la mesa, para poder recogerlas bajo ésta. Si eliges un modelo tapizado procura que sea un tejido a rayas o con motivos pequeños, que se aprecien en su totalidad.

Contrastadas

Además de la madera, que sigue siendo el material más utilizado, en la actualidad se presentan alternativas a tener en cuenta, sobre todo en materiales plásticos. El polipropileno es un material versátil, que se adapta a espacios diversos como el comedor, la cocina o el exterior; y permite poner notas de color intenso.
En cuanto a los tapizados, se lleva la piel en tonos extremos como el blanco o el negro.


SERVICIO DE MESA

Vitrinas, alacenas o aparadores… A la hora de planificar el comedor es importante que cuentes con algún mueble auxiliar que te permita tener a mano el servicio de mesa. Como ves en nuestras propuestas, los hay de todos los estilos y tamaños, así que no te costará encontrar el que mejor se adapte a tus gustos y los metros disponibles.

Buffets

Una de las soluciones más habituales se halla en los modernos aparadores. Son piezas bajas y alargadas, que ofrecen la ventaja de no recargar visualmente la estancia. Se llevan las combinaciones de distintos materiales o acabados, como por ejemplo la madera con el cristal. Una buena idea es aprovechar su superficie para disponer de una lámpara de sobremesa, que proporcione un punto de luz ambiental.

Vitrinas

Si el espacio no es un problema, una alternativa se encuentra en las clásicas vitrinas, que permiten guardar la cristalería y la vajilla a salvo del polvo. El inconveniente es que los frentes acristalados obligan a mantener el conjunto perfectamente ordenado.


TELAS DE COMEDOR

Puede parecer que las telas no juegan un papel destacado en el comedor, más antes lo contrario, son una de las llaves que permiten personalizar la estancia y realzar el estilo. Te ayudan a poner las necesarias notas de color, a potenciar la luminosidad de la estancia y a crear coordinados decorativos que vinculen el conjunto de mesa y sillas con la pared o las ventanas.

Paredes enteladas

Una opción interesante para dar una mayor riqueza al ambiente del comedor es con el entelado de las paredes. Se puede utilizar una sola tela, pero resulta más atractivo combinar un tejido estampado con otro liso o bien con un friso de madera.

Tapizados versátiles

Las texturas y colorido de los tejidos son sin duda la mejor opción para poner un toque de color intenso en la estancia. Si optas por tapizar las sillas con un tejido estampado, procura que sea un motivo pequeño que se aprecie en su totalidad.

Coordinados

En el comedor se pueden establecer coordinados entre el tapizado de las sillas y el papel de la pared. Otra alternativa es utilizar telas de una misma colección para establecer vínculos de unión entre las cortinas y estores y la mantelería.

Marco neutro

Las telas en colores claros y lisas son la mejor solución para recrear un marco neutro que ceda todo el protagonismo a la arquitectura de la casa o al mobiliario. Además te ayudarán a potenciar la luminosidad de la estancia. Para el tapizado de las sillas se recomienda elegir un tejido tratado para repeler las manchas, aunque la mejor alternativa son las fundas hechas a medida.


COMEDOR ABIERTO

En los últimos años, las tendencias apuestan por los espacios abiertos, que acogen distintos ambientes. El comedor ya no sólo se integra dentro del salón, sino que también se abre a la cocina, proporcionando espacios cómodos y funcionales.

Minimalista

El interiorismo contemporáneo apuesta por los espacios abiertos, que permiten mantener la conexión visual entre los distintos ambientes. En ocasiones, son los propios elementos arquitectónicos los que ayudan a delimitarlos: puede ser un pilar, un entrante en una planta irregular, un arco o un cambio de altura de los techos.

Tras un mueble

En otros casos, se utiliza alguna pieza de mobiliario para delimitar visualmente cada una de las áreas y darles una mayor intimidad. Esto puede ocurrir en una propuesta como podría ser colocar un mueble alto para separar la cocina y el comedor respecto al salón. El módulo podría ser un despensero de grandes dimensiones que integre el horno y el microondas.

A todo color

La solución de conectar visualmente dos ambientes requiere mantener la continuidad decorativa entre ellos, de otro modo se podría transmitir una cierta sensación de desorden.

En la cocina

Si tienes previsto integrar el comedor en la cocina, procura reservarle un espacio junto a la ventana, para que disfrute de una buena luz natural. Si la cocina es de estilo contemporáneo, es importante recrear, en el rincón del comedor, un espacio más cálido e íntimo. Para ello puedes recurrir a las telas o al papel pintado en la pared- siempre manteniendo el estilo general-, a las alfombras en el suelo, y a los cuadros o los toques de color en el mobiliario auxiliar o los textiles.

Junto a la isla

Una solución que destaca por su funcionalidad, es la de la isla, que integra todas las zonas de trabajo y está conectado con el comedor. Al estar muy cerca de las grasas que se producen al cocinar, conviene que la mesa y las sillas sean piezas resistentes y fáciles de limpiar. Otro inconveniente puede ser la acumulación de olores, por lo que es importante contar con una campana extractora de gran capacidad.
Los nuevos programas de cocina, elegantes y depurados, se integran bien en el salón.


RENUEVA EL SALÓN

Cambiar las ventanas para potenciar la luminosidad y las vistas, ampliar el espacio con la incorporación de una terraza, renovar las puertas o colocar un nuevo suelo más cómodo a la pisada son pequeñas reformas que seguro que rentabilizarás.

Suelo cálido

Los suelos flotantes de madera no sólo pueden instalarse sobre cualquier pavimento preexistente, sino que su colocación sin cola- mediante lengüeta y ranura- hace posible colocarlo en pocas horas, sin necesidad de tiempos de espera para pisarlo.

Ganar la terraza

Si tienes una terraza o un balcón desaprovechados, sácales el máximo partido mediante un acristalamiento que te permita integrarlos en el salón o crear una sala auxiliar. Elige frentes sin perfiles para conseguir una superficie diáfana que introduzca el paisaje en la decoración.

Puertas nuevas

Si te decides a cambiar las puertas de casa, instala alguna corredera para ganar espacio útil. La mayoría de las firmas ofrecen todos sus modelos en versiones batientes y correderas, incluidos los más clásicos y elegantes.

Resistentes

Los nuevos materiales permiten algo impensable hace tan sólo unos años: crear ambientes confortables en espacios abiertos, sin ni siquiera la protección de los porches, toldos o parasoles. Entre estos materiales destaca el aluminio, que además de resistente es muy ligero, y soporta bien las condiciones del exterior.


SALÓN EXTERIOR

Para disfrutar al máximo de los espacios exteriores cuando llega el buen tiempo, vale la pena configurar un salón con piezas funcionales y cómodas, como éstas que te presentamos.

Bajo la pérgola

Una propuesta distinta a la habitual a la hora de conformar un salón de verano. Se puede disponer un salón junto a la piscina, protegido por una gran pérgola dotada de un toldo plegable y grandes cortinas de tela a los lados.

Fibras artificiales

A primera vista, tienen la apariencia cálida y natural del ratán o del banano, pero en realidad se trata de fibras artificiales. La ventaja  es que éstas presentan una mayor resistencia frente al sol o la lluvia que las naturales, al mismo tiempo que no requieren ningún tipo de mantenimiento.


SALÓN EXÓTICO

Hoy día hay muchas soluciones para conformar un salón en el exterior: Puedes crear una zona de tertulia tipo hall con butacas y reposapiés, una zona de aperitivo con mueble bar y taburetes y hasta un salón con cocina. Pero, sin duda, lo más exótico es el estilo chill-out, ideal para disfrutar del dolce far niente.

Como una isla

Si hay una pieza que no puede faltar en todas las colecciones de mobiliario de exterior actuales, ése es el rincón chill-out. Sin duda es el salón más cómodo, pues las estructuras dan cobijo a sofás, colchonetas o incluso camas, protegidas por toldos y doseles.

Camas doble

El tándem es perfecto para las estructuras de fibras artificiales, madera o aluminio lo forman los nuevos tejidos sintéticos, como el Dralón o el Porotex, entre otros. Estas fibras presentan la gran ventaja de ser resistentes a los rayos ultravioletas y no desteñir los colores, asimismo tienen cualidades drenantes, para repeler el agua y las manchas.

Colchonetas

En los chill-outs los textiles juegan un papel clave: imprescindibles son los cojines y cuadrantes, que ayudan a conformar una base confortable y colorista, al igual que los visillos o cortinas.

Telas

Las chaise-longues también son una buena opción para disfrutar de un rincón de lectura o un solárium en el jardín. Proponemos crear una gran pérgola cubierta por un tejido que impide el paso de los rayos solares. Para los laterales, se tiene la opción del cerramiento con unas cortinas muy densas o bien unos ligeros visillos.

Accesorios

Un ambiente tan especial como el chill-out requiere una decoración a la medida. Elige cojines y plais de tejidos naturales como el hilo o el lino, en los colores de la tierra, y no te olvides de la iluminación. Además del punto general, siempre resulta agradable contar con una serie de farolillos que permitan disfrutar de la cálida luz de las velas.
Los nuevos tejidos sintéticos son resistentes a los rayos de sol: no se decoloran ni destiñen.


COMEDOR EXTERIOR

Bien sea en un gran jardín o en una pequeña terraza, vale la pena contar con una zona de comedor para disfrutar de las comidas al aire libre. Si no dispones de una zona cubierta, que proteja los muebles de la lluvia o la acción directa del sol, procúrate un práctico parasol, un toldo plegable o, en el caso de las superficies más grandes, una estructura tipo pérgola.

Sombrilla

Por su extraordinaria ligereza, el aluminio es un material ideal para piezas que deben moverse con frecuencia como las sillas o tumbonas. Se presentan en distintos acabados (extrusionado, anodizado) y también en una amplia gama de color (pues se puede pintar o lacar).

Pérgola

El aluminio se suele combinar con otros materiales, para conseguir un efecto más decorativo. Se podría combinar una mesa con un sobre compuesto de listones de madera o con un sobre de cristal. Éste ayuda a aligerar visualmente el conjunto.

Porche

Tan importante como la elección del mobiliario, es la situación del comedor. La opción más habitual es disponerlo bajo la cubierta del porche, pero también es posible crear una pérgola que alargue esta zona y proporcione una mayor zona de sombra.

Singular

Los parasoles son unas de las opciones más prácticas y asequibles para disfrutar de un comedor en el exterior, aunque su extensión es más limitada. A los diseños convencionales, hay que sumar algunas propuestas singulares, como podría ser un parasol diseñado para proporcionar sombra a un sofá circular que gira en torno a una mesa.

Equipamiento

Las fibras son otra alternativa a tener en cuenta. Las naturales no pueden estar expuestas directamente a la intemperie- es mejor reservarlas para espacios cubiertos-, pero en cambio las sintéticas no presentan este inconveniente. La tendencia impone modelos voluminosos, que destacan por sus formas curvas y líneas envolventes.
La teca, el ipé, el bolondo o el iroco son las variedades más utilizadas en el exterior.


Fuente:  Casa y Jardín

Más información:  www.baixmoduls.com